El Ayuntamiento de Santander insta a los vecinos a hacer un uso responsable de la pirotecnia durante esta Navidad, sensibilizando así sobre los efectos perjudiciales que tiene para las personas con hipersensibilidad sensorial y las mascotas.
“Somos conscientes de que el uso de la pirotecnia es excepcional y sinónimo de alegría y celebración, pero queremos pedir la colaboración de todos para minimizar el sufrimiento de parte de nuestros vecinos”, ha asegurado la concejala de Salud, Noemí Méndez.
Así, se ha referido a las personas con trastornos autistas, con hipersensibilidad auditiva, bebés y ancianos, que al poseer un sentido del oído más potenciado padecen especialmente las consecuencias de la pirotecnia.
También ha hecho referencia a los numerosos estudios veterinarios que estiman que casi la mitad de los perros (el 45 por ciento) muestra señales de miedo y nerviosismo cuando escuchan petardos o fuegos artificiales.
“Avanzamos para convertirnos en ciudad amiga de los animales y queremos lanzar un mensaje para minimizar el sufrimiento de muchas mascotas de nuestra ciudad, especialmente en los días principales de la Navidad”, ha asegurado la edil.
También ha hecho un llamamiento a los dueños de animales de compañía para que les protejan con el objetivo de asegurar su salud y bienestar.